Robert Adams: PRIMER PRINCIPIO DE LA REALIZACIÓN DEL SER (3)
Es como cuando ves un programa de televisión y te identificas con uno de los personajes, cuando sabes que ni siquiera estás en la televisión. Pero crees que eres uno de los personajes de la serie de televisión. Lo mismo sucede con el mundo. No te involucres. No me refiero a que te vuelvas pasivo. Me refiero a que tu cuerpo hace lo que se supone que tiene que hacer. Recuerda, tu cuerpo vino a esta tierra para hacer algo, y él hará algo sin tu conocimiento. Se cuida de sí mismo, no te preocupes. Pero no identifiques tu cuerpo con tu Ser. Son diferentes. Tu cuerpo no es tu Ser. Y voy a probarlo.

  1. NO ME GOBIERNAN OTRAS LEYES QUE LAS DE DIOS. 17 marzo Es una de las lecciones que más me gustan. Es toda una proclamación de independencia reconociendo mi absoluta sujeción en Dios. La Perfección no puede ser amenazada, y lo que parece ser atacado, nunca existió.
    ¿Cuando me daré cuenta que este mundo no es de Dios y que no pertenezco a la Tierra, ni que ella es mi madre?La pachamama, como la solemos llamar, a más la honramos y le hacemos rituales ,más dividida y enferma está.Mejor empecemos a perdonarla.
    En este reconocimiento se encuentra mi libertad en el espacio-tiempo.Tan sólo fantaseé un régimen especial que al estar de espaldas a la verdad , carece de razón y de paz. Y no contenta con esto, luego le otorgue a Dios toda mi fabricación y todos mis males, y como no, ahora le tengo miedo al ver tanta locura ante mis ojos. Dios seria realmente despiadado y vanidoso.
    La demencia pretende suplantar la Verdad y para hacerlo, necesita que yo bautice cada cosa que veo como real.

He rebajado mi mente a nivel corporal y me he inmolado a mi misma ofreciéndome colillas de esperanza de que algún día, en un futuro, antes que la muerte me alcance, mi plenitud será total en este mundo con mis leyes del Caos .Y así, continuo proyectando mi locura .Las leyes del miedo parecen mantener cautivo al amor y liberado al pecado.
Hoy llevo a juicio a la parte de mi mente que creyó en la percepción y aplico el perdón sobre ella.
No me gobiernan las reglas de una religión, un estado o nacionalidad.
No estoy sometida a unos ídolos de barro.

Las Leyes de Dios son mi liberación y anulan cualquier regla que yo inventé para defender este mundo.
Las Leyes de Dios son consistentes y me sostienen siempre, aun estando en una ilusión, me sostienen.

He fabricado un pensamiento de códigos de barras que clasificaba lo que veía con niveles de calidad, aspecto, intereses en común, procedencia,fecha de envasado y de caducidad manteniéndome separada y consumiendo lo que creía que me faltaba. No sigo defendiendo la locura como verdad.
Las Leyes de Dios cambian el sueño cuando las recuerdo pues yo pertenezco a la Vida, no a la muerte, gracias a Dios.
Y13

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