
- PERMITASEME RECONOCER EL PROBLEMA PARA QUE SEA RESUELTO.20marzo
La clave para que pueda reconocer el problema es ser consecuente . Si pido que se me libere del efecto , estoy diciendo que no soy responsable y que la causa no está en mí.
Hoy recuerdo que no es tan importante la forma que tome la situación fuera, sino la causa que lo originó, osease, yo.
Este mundo es un escenario donde el pecado se manifiesta en múltiples formas, pero la causa es siempre la misma: la creencia de que he hecho realidad mi especialidad de amor.
Si estoy sentada en la mecedora del ego. ¿cómo voy a sentir amor y unidad? ¡No puedo!, puedo ponerme cojines, pintar la silla de colores, revestirla con lacitos y mecerme fuertemente, pero seguiré en el mismo sitio .
Por lo que si la causa es siempre la misma , la solución también lo es, y siendo honesta, era la única que no había contemplado.
Debo reconocer la base del problema , estoy acomodada en una dinámica inverosímil que pretende demostrar que el Hijo de Dios no existe.
Solemos decir el refrán “ Siempre hay una solución para cada problema” , en realidad “siempre hay la misma solución para cada problema”. Si intento solucionar las cosas desde la forma, me volveré a confundir . Debo ir a la raíz. El mundo físico es una ilusión para definirme como no soy , es un acuerdo con la voz del anti-Cristo.
Es decir, la naturaleza del problema es que no lo es. Tan simple que me cuesta y sigo perpetuando en el tiempo soluciones que no me llevan a mirar la silla donde me senté.
Tengo que revisar mi inversión en esta ilusión…
Hoy no resolveré el problema de manera especial, lo resolveré definitivamente. Esa es mi voluntad.
Necesito perdonar todos los atrezzos que pretendían hacer más cómodo mi repantiga-miento.
La solución que Dios ha dado no precisa tiempo, ya se me dió ,pero yo si necesito ver esto por encima de mis significados. Esa es la única función benévola del tiempo inventado , asumir que el tiempo ya ha pasado pues nunca pasó.
¿La silla? nunca estuve sentada
Y13

Robert Adams: SEGUNDO PRINCIPIO DE LA REALIZACIÓN DEL SER (1)
Tienes que tener un fuerte sentimiento, una comprensión profunda de que eres no-nacido. Tú no has nacido, no experimentas una vida, y no desapareces, no mueres. Tú no has nacido, no tienes una vida y no mueres. Tienes que sentir esto, que eres no-nacido. ¿Te das cuenta de lo que esto significa? No hay una causa para tu existencia. No hay una causa para tu sufrimiento. No hay una causa para tus problemas.